El miércoles voló por los aires el proyecto de banco entre CajAstur, Caja Extremadura, Caja Cantabria y la CAM, pero la caja asturiana quiere mantener la relación con sus socios cántabros y extremeños e incluso sumar a otra caja que sustituya a la valenciana. Una de sus potenciales parejas es Unnim, la entidad nacida de la alianza entre Caixa Sabadell, Caixa Terrassa y Caixa Manlleu.

Las cúpulas de ambas entidades han mantenido contactos en las últimas semanas, aunque de forma informal, ya que la fusión de CajAstur todavía no se había roto definitivamente. Unnim tiene a su favor el hecho de que es la última red financiera digerible que queda en Cataluña, ya que el tamaño de CatalunyaCaixa es mucho mayor y su nivel de morosidad más elevado. Esta entidad necesita una inyección pública de 1.718 millones.

"Cualquier entidad financiera que aspire a tener un tamaño importante en España quiere contar con presencia en Cataluña", explican fuentes financieras. Unnim se ha dado de plazo hasta el 30 de septiembre para elegir socio, una vez descartada la posibilidad de encontrar inversores externos para su proyecto de banco. En última instancia, si no llegara a una alianza satisfactoria, podría recurrir a los fondos públicos a través del FROB. Para elevar su capital principal hasta el 10%, requiere 568 millones.

La entidad presidida por Jaume Ribera y dirigida por Jordi Mestre mira fuera de las fronteras de su comunidad de origen, como ya hizo Caixa Penedès cuando acordó crear el banco Mare Nostrum con Murcia, Granada y Sa Nostra. Entre sus posibles aliados figuran Banca Cívica, Ibercaja, Unicaja, y las tres vascas. La BBK, Kutxa y Vital quieren tener concluido su proyecto de fusión a tres bandas, con la celebración de las tres asambleas generales, antes del 30 de junio. Hasta entonces, no mantendrán contactos para incorporar a un cuarto socio.

En todo caso, expertos del sector aseguran que los próximos meses se convertirán en una auténtica partida de póker. "La reestructuración del sistema financiero será de cocción lenta y se convertirá en un juego de estrategia para ver qué opciones son las mejores", explica un ejecutivo de la banca.