El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha aprobado un nuevo decreto que abre la puerta a las 40 grandes centrales termosolares proyectadas en Extremadura a través de un plazo extra que permitirá que todas aquellas que logren apoyo financiero en los próximos meses tengan derecho a prima, lo que garantiza su rentabilidad.

Esta era la principal duda que amenazaba estas iniciativas, que anunciaban inversiones millonarias --en torno a 250 millones de euros por planta-- y creación de empleo --600 durante la construcción y 50 una vez operativas-- en numerosos puntos de la comunidad autónoma.

Pero el Real Decreto 661/2007, que regula la actividad de producción de energía eléctrica en régimen especial, ha eliminado todas las barreras. La clave está en sus artículos 22 y 37, que deben analizarse en orden inverso. Así, el artículo 37 establece que, de momento, sólo habrá 500 Megawatios (Mw) con derecho a prima en el campo de la energía termosolar. Esto no sería suficiente ni siquiera para Extremadura, puesto que hasta la fecha se han presentado públicamente en la región proyectos que ya superan esa potencia.

EL PUNTO CLAVE Sin embargo, el artículo 22 añade una nueva condición que establece que cuando se alcance el 85% de esa potencia --es decir, cuando se hayan abierto plantas que sumen 425 Mw-- se abrirá un plazo adicional de al menos un año para todos los proyectos que en ese momento estén aprobados definitivamente. Según fuentes del sector consultadas por este diario, el Gobierno central se ha comprometido ya a que ese plazo alcance los dos años.

En la práctica, y teniendo en cuenta, que una planta termosolar se construye en un plazo aproximado de un año y medio, esto supone que todas las centrales que cuando se alcance ese momento --el de los 425 Mw conectados a la red-- hayan logrado la financiación, podrán ponerse en marcha y tendrán garantizada la prima.

Hasta la fecha se han presentado ante la Junta de Extremadura unos 40 proyectos de grandes centrales termosolares --de entre 20 y 50 Mw--, aunque los expertos consultados calculan que aproximadamente entre 5 y 10 lograrán completar todo el proceso. Los dos grandes cuellos de botella para las empresas serán la financiación --cada proyecto precisa un préstamo de en torno a 250 millones de euros-- y el suministro de materiales, puesto que las fábricas actuales no podrán abastecer toda la demanda que se prevé que se produzca a corto y medio plazo.

PRIMERA VALORACION Luis Crespo, presidente de la Corporación Empresarial de Extremadura (Cex), que apoya de una u otra forma muchos de los proyectos termosolares impulsados en la región, destacó que esta norma colma muchas de las aspiraciones del sector.

En esta línea, Crespo resaltó que lo más importante es que desde el ministerio "no se pone límite" a la potencia total que tendrá derecho a prima.

Por eso, el presidente de la Corporación Empresarial de Extremadura pide que la Administración autonómica "sea lo más rápida posible" en la tramitación de los proyectos, puesto que en este nuevo marco normativo "cualquier retraso en una autorización administrativa puede desbaratar una planta".

En cuanto a la situación de partida, Crespo resaltó que Extremadura tiene varias ventajas con respecto a su principal competidora, Andalucía. Entre otras, que "es más fácil" obtener el terreno necesario y que hay una mayor disponibilidad de agua.