Luis Lozano, médico de Atención Primaria del Centro de Salud Urbano I de Mérida, afirma que la prescripción por principio activo es algo "muy positivo, ya que se da más importancia a la molécula que a los laboratorios, y precisamente España es muy conocida por tener muchos laboratorios".

Además, según Lozano, el hecho de recetar por principio activo a largo plazo "ayudaría a que los jóvenes aprendieran qué medicamento es el que se aplica en cada enfermedad"; por otra parte, se facilita el trabajo del médico, que no tiene que conocer la larga lista de marcas farmacéuticas. Y el paciente supera un gran "problema cultural porque la referencia ya no será ni la marca, ni el color, ni la forma de la pastilla o el envase.

Lozano asegura que ante patologías agudas "siempre" receta por principio activo, porque así el paciente se implica más en su propio caso, "ya que tiene que elegir", aunque afirma que todavía en ocasiones, este método se confunde con la prescripción de genéricos.