El documento presentado por el Grupo Gallardo abre dos estudios simultáneos de carácter ambiental. Por una parte, el Ministerio de Medio Ambiente iniciará ahora el estudio de la documentación para emitir la Declaración de Impacto Ambiental, que puede ser positiva (ninguna traba), negativa (rechazo del proyecto) o condicionada (aceptación si se corrigen determinados aspectos). Por otra, la Junta hará lo propio para dar la Autorización Ambiental Integrada, que exige los valores más restrictivos que posibilita la ley para las emisiones contaminantes.

Mientras, el otro departamento implicado, el Ministerio de Industria tiene capacidad para conceder una autorización previa.

La participación pública se articula a través del trámite mediante el cual la Junta pondrá en información pública el Estudio de Impacto Ambiental, durante un periodo en el que se podrán presentar alegaciones.

Estos trámites ambientales no tienen una duración precisa (en unos el plazo está fijado y en otros no) y podrían verse afectado por las elecciones, con la formación de nuevo Gobierno poco antes del verano.