Sin pasto para el ganado. Con escasez de agua para el riego. Pérdidas económicas que hacen peligrar la actividad primaria. Así vive el campo extremeño la sequía. Hace meses que se está dando la voz de alarma de que la tierra no respira.
Por ello, la Junta de Extremadura va a poner en marcha una medida para intentar paliar las consecuencias que para agricultores y ganadores conlleva la falta de precipitaciones. Se trata de préstamos económicos que se ofrecerán a coste cero, esto es, sin intereses, para que los profesionales del sector puedan hacer frente al panorama actual. Se podrá solicitar un mínimo de 3.000 euros y un máximo de 40.000. Y habrá tres años para devolver el dinero. La intención es que sean más de 8.000 los beneficiados.
Podrán acceder al mismo titulares de explotaciones agrícolas de cereal, olivar y viña de secano y de explotaciones ganaderas de bovino, ovino, caprino, porcino, equino o apicultura.
Esta acción se pone en práctica tras la firma de un convenio entre la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio y varias entidades bancarias colaboradoras. A través del acuerdo, la Administración autonómica se compromete a asumir el interés que generen estos créditos, el cual nunca podrá ser superior al 1,5%. Para ello, la Junta destinará 4 millones de euros. De esta forma, se calcula que el volumen de préstamos a formalizar será de 160 millones.
El decreto que recoge esta medida establece los baremos para solicitar el crédito: en cereal de secano, 100 euros por hectárea inscrita en el registro de explotaciones; y en olivar de secano y viña de secano, 300 euros por hectárea. La misma cantidad se fija para cada unidad de ganado mayor.
Se espera que la medida dé oxígeno al campo.
