Roberto Serrano, asesor jurídico de la Unión de Consumidores de Extremadura (UCE) y responsable de la organización en Badajoz, recomendó a los posibles afectados por la intoxicación alimentaria causada por el pollo contaminado que pidan un informe médico donde se determinen las causas de la enfermedad y su posible relación con el consumo de este producto.

Serrano aconsejó además conservar los justificantes de compra y los envases del pollo para acompañar las reclamaciones. En cuanto a las indemnizaciones explicó que en primer lugar debe reclamarse la devolución de lo pagado por los pollos, y más adelante será el momento de pedir que se resarzan los daños "donde habría que valorar días de baja y otros posibles perjuicios como vacaciones perdidas o viajes que no pudieran realizarse".

Respecto a la situación generada, el representante de UCE hizo un llamamiento a la calma "porque se trata de un caso aislado", y comentó que los sistemas de alerta han funcionado correctamente. Asimismo, Serrano quiso tranquilizar a los afectados "ya que los casos están siendo leves" y explicó que debe acudirse al médico "pero sin alarmarse".