Un historiador, Mariano Bendito, encontró este tratado, en latín (1.258), en donde demuestra la gran mentira de los "países catalanes". Se dice en él, según este gran historiador, que la Cataluña actual era territorio francés, hasta el 16 de julio de 1.258. Lo que hoy es Cataluña, pagaban, en aquélla época, vasallaje a la corona francesa.

Este Tratado se inicia, según relata, con estas palabras: "Es universalmente conocido que existen desavenencias entre el sr. rey de Francia y el sr. rey de Aragón, de las Mallorcas, y de Valencia, conde de Barcelona y Urgel, señor de Montpellier; por lo que el sr. rey de Francia dice que los condados de Barcelona, Besalú, Urgel, etc. son feudos suyos, y el sr. rey de Aragón dice que tiene derechos en Carcasona, Tolosa, Narbona...." de donde se deduce que las tierras de la parte española estaban muy bien relacionados con Aragón, y las francesas con Francia.

El francés cedió al español los condados españoles, y el español, cedió, al rey francés, las tierras francesas. Esto es, en síntesis, lo que dice el Tratado de Corbeil, según el historiador, de trascendencia histórica, ya que que se firmó 29 años después de la reconquista de Mallorca y 20 años después de la de Valencia. Con lo que se patentiza, presuntamente, que la "corona catalo-aragonesa" no conquistó Mallorca y Valencia. Cataluña, en aquélla época no existía, por tanto ese invento de la "corona catalana" ¿de dónde ha salido?

No es veraz que Cataluña tuviera lengua propia. Entonces era inexistente política y jurídicamente, ¿cómo podían dar la lengua catalana a Valencia y Mallorca?. Después de este Tratado, el rey Jaime empezó a legislar, empezando por la moneda, en agosto de 1.258, acercando políticamente los condados que eran ya feudatarios suyos, y que con el tiempo se llamó Cataluña. Seguro, o casi, que la lengua que se debía hablar allí sería el occitano, el provenzal o lemosín, que se hablaba en tierras del sur de Francia. La lengua actual se llamó oficialmente "llemosí" hasta la segunda mitad del siglo XIX. Por todo este Tratado, no es descabellado pensar que los catalanes obvien hablar de él. Les desmontaría su tinglado nacionalista-independentista y el "SOM UNA NACIÓ". Sí hablan del Tratado, o Pacto del Tinell, en el que se confabularon contra el Partido Popular. Quedaría en evidencia muchas cosas que, supuestamente, por interés, las callan. De aquí a dos o tres mil años, los Pujol, los Mas, los Homs, los Durán, los Carod y demás extras, podrán, entonces, asegurar que Cataluña ya existía hacia el siglo XIX.