Aunque no han llegado todavía las fechas claves, ya estamos inmersos en la Navidad desde hace semanas. Las ciudades se han engalanado y ya lucen su esplendor navideño; los dulces navideños ocupan los lineales de los supermercados y hasta el tradicional roscón de reyes ya encuentra listo para su degustación.
De este producto tan popular y ancestral que no falta en ningún hogar español vamos a hablarte. Siempre lo hemos identificado con la celebración de la llegada de los Reyes Magos. Pero no es así. En la Roma clásica las fiestas en honor a Saturno, las saturnalias (que al principio solo duraban tres días, pero luego acabaron siendo una semana de celebraciones, del 17 al 24 de diciembre de nuestro calendario actual), también denominadas "fiestas de los esclavos" porque los papeles de amos y esclavos se intercambiaban, se comía una torta a base de higos, miel y dátiles.
En ese dulce se ocultaba un haba en la masa y el afortunado que la hallaba merecía el honor de ser coronado rey de la fiesta, tal como sucede hoy, pero sin declamación sobre la silla que preside la mesa.
A lo largo de los siglos, el roscón ha evolucionado hasta su composición actual, que cuenta con múltiples variantes. Y una de ellas es la que te ofrecemos hoy. Es posible hacer este postre típico de la época navideña con ingredientes naturales y sin necesidad de encender el horno. Te aseguro que te encantará y que no notarán la diferencia con el convencional.
Estos son los ingredientes necesarios
- 200 gramos de almendras crudas
- 100 gramos de dátiles sin hueso
- 50 gramos de coco rallado
- 2 huevos
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Ralladura de naranja y limón
- Frutas confitadas o deshidratadas para decorar
Y esta es la sencilla preparación
Lo primero, triturar las almendras hasta obtener una harina fina. Luego, añadimos los dátiles y seguimos triturando hasta formar una masa pegajosa. La pasamos a un bol y le agregamos el coco rallado, los huevos, la levadura, la vainilla y las ralladuras de cítricos. Mezclamos bien con una espátula o con las manos hasta integrar todos los ingredientes.
Seguidamente, dale forma de roscón. Para ello, usa un molde redondo desmontable o simplemente hazlo sobre una bandeja forrada con papel vegetal. Lo importante es dejar un hueco en el centro y alisar bien la superficie. Luego, decoramos con las frutas confitadas o deshidratadas al gusto, presionando ligeramente para que se adhieran a la masa.
Y ya llegamos a final: cocinarlo. Para ello necesitas el microondas. Introdúcelo a máxima potencia durante unos 10 minutos.
Déjalo enfriar y listo: ya tienes el roscón de reyes sin azúcar, sin harina y sin horno. Sirvelo con una taza de chocolate caliente o de un vaso de leche.
Es un postre ideal para compartir con la familia o los amigos en estas fechas tan especiales.
No esperes a Reyes Magos para degustarlo. Date el placer de comer este dulce caseño, nutritivo, saludable y con pocas calorías.
