Existen múltiples técnicas de meditación, que crecen en complejidad a medida que se domina el objetivo primordial de concentrarse en un punto escogido sin perder la atención. Es difícil de alcanzar. La postura y la respiración correctas son fundamentales para iniciar una sesión. La meditación puede ser analítica o dirigida a fijar la atención en el instante presente, sin seguir al pensamiento. Uno de los primeros médicos que investigó los efectos de la meditación fue Herbert Benson, de la Escuela de Medicina de Harvard, en Boston (Massachussets, EEUU), que en 1967 analizó a un grupo de practicantes.