El camino para lograr la capitalidad cultural se hace a base de puntos. Ese el objetivo de la campaña denominada Cáceres a punto que el ayuntamiento cacereño pone en marcha junto a Plasencia y Castelo Branco, sus socios en la asociación Triurbir, para implicar a los ciudadanos en la iniciativa municipal con vistas al año 2016.

La fórmula para conseguirlo tiene su origen en el proyecto Plaza Mayor, plaza color , que creó en el 2004 el Colectivo de Artistas y Obreros del Mundo con motivo de la edición de Foro Sur. Este variopinto grupo creativo de 11 miembros --con periodistas, empresarios, un bombero, un anticuario o pintores, entre otros-- vistió los balcones de la plaza Mayor con alrededor de 200 círculos que encarnaban los colores del arco iris. La idea tuvo éxito y se mantuvo días después para ambientar la edición del festival Womad.

Ahora, y tras la buena acogida a este proyecto artístico, el ayuntamiento pretende contagiar a los ciudadanos para que hagan lo mismo en sus casas. De esta forma, desde el 23 de mayo al 10 de junio, los cacereños recibirán por correo tres puntos de los colores verde, rojo y amarillo, con el logotipo de la capitalidad y el lema de la campaña. Su destino serán los balcones o ventanas para alcanzar la cifra de los 100.000 repartidos por toda la capital.

El primero en dar ejemplo fue ayer el ayuntamiento, que ya ha colocado los primeros puntos en las fachadas de la plaza Mayor y las principales calles y plazas del centro, además de en el entorno de la Cruz de los Caídos.

Una plaza pop

El proyecto del Colectivo de Artistas y Obreros del Mundo nació con la idea de "convertir un sitio clásico como la plaza Mayor en una zona pop", según explicó ayer uno de sus miembros. "La iniciativa contó con la colaboración de los vecinos, que permitieron la entrada en sus domicilios para que pudiéramos colgar los puntos", dijo.

El Colectivo de Artistas y Obreros del Mundo, con sede en Cáceres, confirmó que ha cedido gratuitamente los derechos de su obra para la campaña. Miembros del grupo participaron ayer, a título particular, en el montaje de los círculos que, a diferencia de los originales en tablé, están hechos en un cartón plastificado más vistoso y llamativo.

En el proyecto también participarán los centros educativos para elaborar sus propios puntos. "Nos hace mucha ilusión que tenga continuidad", aseguraba ayer otro componente de artistas y obreros del mundo. Las obras que concibieron como adornos para cambiar el panorama visual del centro se convierten ahora en reclamos para la capitalidad. Una demostración del valor del arte.