Aguas fecales y basuras amenazan el entorno de la Ribera del Marco. Un colector de la zona sur vierte directamente a la Ribera en las inmediaciones de la huerta del Conde, próximo a las obras de la nueva urbanización. En ese punto, las aguas residuales se mezclan con el pequeño cauce de la ribera convirtiéndolo en un lodazal de agua negra y maloliente.

Los restos fecales se acumulan en ambos márgenes del cauce y son arrastrados por la corriente. Este agua sirve aún de riego en las pequeñas huertas que perviven en la zona.

Ni el ayuntamiento ni la asociación de vecinos de Puente de San Francisco, a la que pertenece esta zona, conocían ayer la existencia de este foco de insalubridad ni las causas, aunque aseguraron que estudiarían la situación, según confirmaron el concejal de Obras, Joaquín Rumbo de la Montaña, y el presidente vecinal Juan Burgos.

El colector general discurre por la Ronda de San Francisco. El origen del desvío de este colector podría estar en las obras de urbanización que se acometen en la huerta del Conde, frente al palacio de justicia, aunque ayer este diario no pudo confirmar este extremo.

BASURA EN ZONA VERDE También la zona verde de la ribera situada en las proximidades del antiguo molino de aceite (dirección charca Musia) y cercano al vertido de ese colector, presenta un evidente estado de abandono a pesar de que es un espacio con cerramiento y muy frecuentado por paseantes y deportistas.

La basura se amontona en todo el entorno del parque, tanto dentro como fuera de la charca. Decenas de botellas, bolsas, papeles y objetos varios flotan en sus orillas y aparecen sobre los juncos que las bordean. También en el área exterior se encuentran dispersas por el jardín decenas de botellas rotas, cristales, paraguas abandonados y materiales de diferente índole, según ha podido comprobar este diario.

La Ribera del Marco ha sido objeto en los últimos años de un importante proyecto de revitalización y mejora, con una inversión millonaria --sólo la segunda fase tenía un presupuesto de 5,6 millones de euros--, en el que se contemplaba el encauzamiento del canal y la creación de zonas verdes y de ocio. En este proyecto se incluyó, por ejemplo, la rehabilitación de Fuente Fría y sus alrededores, también convertido en parque.

Precisamente la recuperación de este entorno natural que bordea el este de la ciudad ha sido uno de los "bastiones del programa electoral del PP", en palabras hace dos años del portavoz adjunto del consistorio, Francisco Javier Castellano.