Cristales rotos, además de restos de madera, palés, botellas, harapos y basura que se acumulan en el interior del local situado en el número 5 de la avenida Virgen de la Montaña que hace unos años fue una tienda de muebles de cocina y que desde hace meses utilizan indigentes para pernoctar, según recuerdan los vecinos y propietarios de los establecimientos de la zona, que reconocen el trasiego de personas que se ve todos los días en ese inmueble abandonado. "No causan molestias a los vecinos, aunque en alguna ocasión han hecho algún fuego que puede ser peligroso", asegura la propietaria de uno de los establecimientos de esta céntrica avenida. Además temen que el mal estado en el que se encuentra el techo del local, con una estructura metálica que se está viniendo abajo, pueda causarles algún daño.

La policía ha actuado en varias ocasiones para desalojarlos y ha remitido informes al ayuntamiento advirtiendo del peligro que entraña la suciedad acumulada. Uno de ellos fue el pasado verano: "se les notificó el riesgo que ocasionaba el estado en el que estaba el local y se les comunicó que estaba siendo utilizado por indigentes", señaló la concejala de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro. El pasado viernes la policía volvió a advertir del riesgo de incendio que puede entrañar la acumulación de basura en el interior del local.

Tras la primera notificación repusieron los cristales rotos. Ahora el área de Disciplina Urbanística "ha vuelto a contactar con los propietarios del local y ya se han puesto en contacto con el ayuntamiento para ver las acciones que tienen que llevar a cabo", señaló Elviro. Desde el área que dirige comenzaron a trabajar este año en la elaboración de un inventario de las inmuebles deshabitados que podrían estar siendo utilizados por sintecho , después del derrumbe de una vivienda abandonada de Fuente Concejo, que era frecuentada por un indigente.

En el caso de este local, los vecinos proponen además que se tomen otras medidas más drásticas a la reposición de los cristales, con el fin de evitar que vuelvan a romperlos y accedan de nuevo al interior. Plantean que una vez que se limpie el interior, se coloquen verjas o se tapie el ventanal.