Cinco jóvenes, todos mayores de edad, a los que hace unos días sorprendieron agentes de la policía local realizando grafitis --tres de ellos en un colegio público y los otros dos en establecimientos comerciales de las calles del centro, como Pizarro y Moret-- serán juzgados por los daños causados con la realización de sus pintadas.

El asunto está ya en manos de la justicia, aunque lo que está aún por determinar es si serán acusados, y juzgados, por la comisión de un delito o por la comisión de una falta, ya que esto dependerá de la cuantía de los daños que han causado. Si los daños causados no superan los 400 euros será un juicio de faltas, que conlleva pena de multa o trabajos en beneficio de la comunidad; y si superan los 400 euros sería por delito, lo que conlleva incluso penas de prisión. Además, en el caso del colegio las penas podrían llegar a ser más elevadas, pues se han dañado bienes de dominio público.

La cuantificación de los daños es uno de los trámites que el juez solicitará se realice durante la investigación e instrucción de la causa, ya iniciada, así como también la toma de declaración a los acusados o el ofrecimiento de acciones a los perjudicados.

Según ha podido saber este diario, estos dos procesos judiciales se han derivado de sendos atestados policiales remitidos por la policia local al Juzgado que estuvo de guardia la semana pasada, en concreto al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de la ciudad, tras sorprender in fraganti a los grafiteros en el colegio y el centro y proceder a su identificación.

"Estos grafiteros, de los que hay que destacar son todos mayores de 19 años, no fueron detenidos y puestos a disposición judicial, pero lo que sí hizo la policía fue identificarlos y después remitir sus atestados al juzgado para que se lleven a cabo las actuaciones judiciales que se consideren oportunas, que es lo que se va a hacer", indicaron a EL PERIODICO fuentes jurídicas.