Un total de 67 ciclomotores que no cumplían con la normativa de tráfico han sido sorprendidos por la Policía Local durante los dos primeros días de la campaña que el ayuntamiento ha iniciado para evitar las infracciones llevadas a cabo por los motoristas.

El concejal responsable de Seguridad Ciudadana y Movilidad Urbana del ayuntamiento, Santos Parra, informó ayer a EL PERIODICO que la mayoría de estos 67 ciclomotores fueron retenidos porque algún ocupante carecía de casco, no tenían los papeles del seguro en regla o bien su vehículo no había pasado la ITV. De los 67, 11 se llevaron al depósito y otro seis fueron denunciados.

El concejal delegado de la Policía Local señaló que esta iniciativa se realiza para conseguir "una ciudad transitable y sin ruidos"; y citó como su principal objetivo el "evitar los accidentes en la ciudad y los impactos por ruidos que provocan numerosas molestias en los vecinos".

Santos Parra afirmó que se ha comprobado que un alto porcentaje de jóvenes conductores "no llevan la documentación exigida y circulan sin casco con el riesgo que esto supone para los demás".

Por otra parte, Santos Parra destacó que desde que se ha comenzado con los controles se han intensificado las denuncias a motoristas de forma "muy notable".

SISTEMA PERMISIVO

El concejal delegado de la Policía Local consideró que el anterior sistema de control era demasiado permisivo para los conductores, por lo que las normas eran constantemente infringidas.

Asimismo, el edil recordó que los controles que se están realizando han ido precedidos de una campaña informativa, "se informó sobre las medidas que se han empezado a tomar para evitar las infracciones por los motoristas, así como también de los controles de alcoholemia que se están instalando los fines de semana en el recinto ferial".

En otro orden de cosas, Parra anunció que ya se ha comenzado a retirar la publicidad exterior que no está autorizada por el ayuntamiento. El coste por la infracción para los propietarios de las vallas asciende a 150 euros.