El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de Cáceres ha publicado hoy las bases reguladoras de segundo Plan Activa Cultura de la Diputación para 2018, en el que hay una partida de 1.620.000 euros y que obliga a los municipios menores de 20.000 habitantes que quieran beneficiarse para cumplir con la Ley de Memoria Histórica.

Según la bases, de acuerdo con el Plan Estratégico de Subvenciones y en cumplimiento del artículo 15 de la ley las administraciones públicas que soliciten la ayuda a la institución provincial asumirán el compromiso de cumplir con la norma, siendo un caso específico de reintegro en caso de incumplimiento".

El Plan Activa Cultura se destina a la financiación de actividades culturales y deportivas de entidades locales de la provincia con una población inferior a 20.000 habitantes.

El objetivo es fomentar la actividad cultural y deportiva de la provincia, posibilitando el acceso y la realización de estas actividades a través del aprovechamiento de los recursos disponibles en el territorio y de la dinamización de los agentes sociales, culturales y deportivos, en palabras en su día del diputado de Cultura, Juventud y Deportes, Álvaro Sánchez Cotrina.

Todo esto, según el diputado, "bajo criterios de equilibrio territorial, apoyo a iniciativas singulares e igualdad de oportunidad para el ejercicio activo de la cultura y el deporte".

Por su parte, el portavoz del PP, Alfredo Aguilera, explicó en su momento la abstención de su partido en la aprobación del documento "porque se obliga a los ayuntamientos a aportar una cofinanciación que antes no era necesaria, independientemente de la situación financiera que atraviese cada municipio".

Otra de las novedades de la publicación de este plan es que este para este año se trata de simplificar los trámites burocráticos, por lo que se aglutinan en una sola convocatoria las diversas actividades que hasta ahora eran objeto de programas de ayudas independientes, "con la consiguiente generación de eficacia, celeridad y eficiencia administrativas".

De este modo, de las seis convocatorias que se publicaban en años anteriores para actividades culturales y deportivas, se pasa una sola convocatoria, "ahondando en la autonomía municipal para que sean los municipios los que decidan lo que quieren y lo que necesitan".