Sillas, mesas y colchones apilados en la mayoría de las dependencias. Esa es la imagen que puede observarse si se accede actualmente al interior del colegio mayor Francisco de Sande, que cerró definitivamente sus puertas el pasado mes de julio tras casi tres décadas albergando a estudiantes de todos los puntos del país.

El cierre, motivado por ser insostenible económicamente, según explicó la diputación provincial, dueña del mismo, supondrá dotar a Cáceres de un nuevo espacio cultural, ya que allí se trasladará el Museo de Historia y Cultura de Cáceres, ubicado en Casa Pedrilla desde 1995. El cambio, que se hará por fases, costará 1,5 millones de euros.

En este momento los técnicos de diputación realizan un estudio de las estructuras para valorar el estado en el que se encuentran y decidir si necesitan un refuerzo o una actuación de mayor envergadura. Según explicó ayer el arquitecto técnico, los forjados están preparados para soportar 300 kilos por metro cuadrado pero ahora necesitarán aguantar 500 kilos, por lo que es previsible que, al menos en algunos tramos, sea necesario un refuerzo de las estructuras. Ya han finalizado las catas. Ahora algunas de las vigas se llevarán a empresas especializadas para la realización de un estudio más exhaustivo.

Una vez finalizado ese análisis de las estructuras comenzará a realizarse el proyecto de reforma, que deberá licitarse y salir a concurso. La idea es que el edificio, de 4.000 metros, se convierta en un espacio diáfano. El acceso al museo se realice por el portón que actualmente conecta con las pistas deportivas del colegio (ubicado a la derecha de la entrada principal). Se ha decidido así porque por esa zona discurre parte de la muralla almohade, por la que habrá que pasar antes de acceder al interior del museo.

LA RECEPCION En el antiguo gimnasio (ubicado ya dentro del edificio junto a las pistas deportivas) se prevé la instalación de la recepción y de ahí se dará acceso a todo el espacio museológico. La salida se realizará por la entrada principal del colegio mayor, ubicada en la plaza de Pereros.

Otra de las actuaciones previstas es cambiar de lugar el salón de actos, que actualmente se encuentra en una antigua iglesia que albergaba el edificio, del siglo XV. Se respetará la doble altura de la misma para dejar al descubierto el techo abovedado. Ahí se instalará parte de la exposición permanente del museo.

El espacio cultural albergará la exposición permanente del museo Pedrilla y otras muestras temporales. Además permitirá la celebración de talleres y contará con un espacio dedicado a los investigadores de los fondos artísticos (segunda planta), del que carecían hasta ahora. Contará también con un espacio para hostelería y restauración, que se ejecutará en el antiguo comedor del colegio mayor.