Representantes de la Asociación Unificada de la Guardia Civil solicitaron ayer al ayuntamiento que les facilite un local municipal en el que puedan llevar a cabo las actividades. A cambio se ofrecen a desarrollar cursos sobre educación vial y seguridad en los centros escolares o las asociaciones de vecinos en esas mismas instalaciones.

"Estamos abiertos a las propuestas que puedan hacernos para ofrecer charlas en los colegios o incluso hacer estudios de seguridad a propuesta de los barrios", señaló el secretario de comunicación de la organización en Cáceres, Sergio Ramos. Junto a él estuvieron también el secretario de la federación extremeña, Agustín Pereira, y otro miembro de la directiva nacional, Jesús Santamarta.

En declaraciones a este diario,

Ramos afirmó que no tienen posibilidad de hacerse con un local, "ya que el único presupuesto de la organización es el resultante de la cuota anual" de los 600 socios en la provincia de Cáceres --72 euros por socio-- y parte de ellos se invierten en el servicio jurídico y cursos de formación y defensa, "porque la dirección general no nos los da", se quejó. El colectivo se convertirá pronto en asociación profesional, tal y como les autoriza el cambio introducido en la ley de derechos y deberes de la Guardia Civil.