"No voy a flaquear, cuando el gobierno toma una decisión no hay marcha atrás", dijo ayer la alcaldesa, Elena Nevado, en cuanto al traslado del mercado franco de Ronda de la Pizarra a Vegas del Mocho, lo que significa que, como ya anunciara la semana pasada el ayuntamiento, el mercadillo estará mañana en su nueva ubicación.

Nevado pidió ayer a los comerciantes ambulantes "flexibilidad" con el traslado. "Entiendo su incertidumbre, pero a la larga seguro que se van a beneficiar", dijo la regidora cacereña. Y añadió que "a nadie se le obliga a ir al mercadillo, sólo es una oportunidad de negocio que, además, tiene una larga lista de espera", haciendo referencia a que el pasado día 9 de enero se registraron en el consistorio más de 20 solicitudes para instalar puestos en el mercado franco. "Si los actuales vendedores no quieren ir están en su absoluta libertad pero tenemos una larga lista de espera para asentarse allí, por lo que les daríamos una oportunidad a esos otros", recalcó. Por último, pidió a los concejales socialistas que "tengan coherencia y sensatez en vez de poner trabas a las decisiones que se toman desde este gobierno".

Por su parte, los comerciantes ambulantes mantienen la reunión de mañana, en la que decidirán si montan o no sus puestos en Vegas del Mocho. Según el portavoz, José Manuel Morán, "la mayoría no quiere".