El reventón de una tubería en la ronda de San Francisco dejó ayer sin agua a cientos de viviendas y negocios del centro durante cinco horas. La avería, registrada en una de las conducciones que enlazan con el depósito de la Montaña, inundó el tramo de la vía comprendida entre el cruce de la avenida de la Hispanidad y la calle Roche Sur Yon. Hasta las cinco de la tarde no quedó restablecido el servicio, según informó el concejal de Infraestructuras, Miguel López.
La anomalía en la red de abastecimiento obligó también a la policía local a cortar el tráfico en la zona y desviar a los conductores por las calles aledañas, ya que el tramo de calzada quedó impracticable para el paso de los vehículos. Una brigada de operarios de Canal de Isabel II, empresa concesionaria del servicio de abastecimiento a la ciudad, se emplearon a fondo pasadas las 12 de la mañana para achicar el agua que salía a borbotones de la tubería reventada en las inmediaciones de la ribera del Marco.
El concejal Miguel López descartó ayer que la avería se hubiera producido por la antigüedad de la conducción y planteó como principal hipótesis, a la espera de conocer las causas, que se hubiera debido a una subida de la presión. López confirmó que la tubería daba servicio a una amplia zona del centro en la que se incluían las avenidas de España o de la Montaña, además de la plaza de Colón, donde las viviendas y los negocios se quedaron sin abastecimiento antes de la hora de comer, según pudo confirmar este diario con vecinos. Fuentes de la jefatura aseguraron que ayer recibieron "cientos de llamadas" de avisos y quejas durante el mediodía.
López recordó ayer que en esta misma zona ya se han producido otras averías en las mismas circunstancias, sin poder determinar a que se pueden deber a pesar de las mejoras realizadas en la red de abastecimiento. En cualquier caso, la de ayer no fue subsanada hasta pasadas cinco horas con las consiguientes molestias en domicilios y establecimientos hosteleros abiertos en domingo. La circulación no quedó restablecida hasta después de las cinco de la tarde, según indicaron a este diario fuentes de la jefatura.
