Vecinos de la barriada de Los Fratres muestran su malestar por la cantidad de heces de perros esparcidas por las aceras. La última denuncia por este motivo que se ha puesto en esta zona ha sido por los excrementos que se encuentran cada día en la plaza de Suecia y en la calle Luxemburgo. «Llamo cada vez que lo veo a la policía local, el problema es que luego nunca veo pasar por aquí a los agentes», señala Fernando Silgado, un vecino afectado.

Solicita que se haga frente común a este problema y que la policía comience a vigilar y a multar a los dueños que no recojan los restos de sus animales. «Muchos los llevan sueltos o con la correa larga, hacen como que no han visto que su perro hace sus necesidades y se marchan», agrega Fernando Silgado, que asegura que cada día tiene que sortear al menos media docena de heces.

El problema de los excrementos de los perros no solo es de Los Fratres, sino que la situación se da en todos los barrios de la ciudad y enfada a muchos cacereños. Ayer un vecino de Residencial Universidad mostraba también su queja por este asunto.

Dejar las heces en la vía pública está prohibido. «Por motivo de salubridad, queda categóricamente prohibido que los animales realicen sus deposiciones en la vía pública», dice la ordenanza. Y añade que «el conductor del animal está obligado a recoger los excrementos, debiendo incluso limpiar la parte de la vía que hubiera resultado afectada». Las multas oscilan entre 30 y 3.000 euros.