Las obras del ensanche de Mira al Río-Puente de San Francisco han convertido en una "odisea" salir y entrar en algunas de las viviendas de la zona, según han denunciado al menos los vecinos del bloque número 11 de Mira al Río. Consideran que los accesos que se han habilitado para las obras, que comenzaron a finales de enero, son "peligrosos e insuficientes", por lo que exigen pasos adecuados y seguros.

El único paso para que los peatones salven las obras en Mira al Río es una escalera estrecha por la que "malamente pasa una persona", afirma una portavoz del vecindario. "Aquí hay muchos niños y mayores para los que es muy difícil cruzar por ahí. También están los cochecitos de los niños, es imposible", añade.

La solución que han ofrecido los operarios de la obra es que los vecinos pasen por la calle Macarena. Sin embargo, esta vía es muy empinada y carece de acerado, por lo que se hace muy difícil el tránsito para ancianos y los coches de niños pequeños. "A veces cruzamos por medio de las obras, pero normalmente no nos dejan. Salir y entrar en casa se ha convertido en una odisea y deberían buscar una solución", pide una vecina del número 11 en nombre del bloque.

Por otro lado, más de 160 firmas de vecinos de la zona de Puente de San Francisco se han presentado en el registro municipal para pedir el derribo total del puente.