Extremadura saca una lectura positiva de su participación en el Campeonato de España infantil y cadete de baloncesto disputado en Córdoba: sus chicas progresan a mejor ritmo que los chicos, lo cual no ha sido habitual en los últimos años.

De hecho, el mejor puesto conseguido por las cuatro selecciones fue el duodécimo de las infantiles. Los demás estuvieron más bien en la cola de las clasificaciones: el infantil masculino, decimocuarto y los dos cadetes, decimoséptimos. En todo caso, el balance final de victorias-derrotas roza el 50% de buenos resultados: de 17 partidos que jugaron, los extremeños ganaron ocho --con la salvedad de que buena parte de ellos frente a Ceuta y Melilla-- y perdieron nueve.

"Lo mejor ha sido que las chicas nos dejan mejor sensación que los chicos, que se demuestra que se están haciendo las cosas bien en el baloncesto femenino. Han dado un paso adelante y eso nos tiene que alegrar", afirma el director técnico de la Federación Extremeña, Mario Madejón. En su opinión, por encima de los resultados está el hecho de que "prácticamente en todos los partidos --exceptuando una derrota clara ante Andalucía-- se ha competido, se ha estado metido en los partidos hasta el final".

Este año, otra de las novedades ha sido la presencia de entrenadores de prestigio nacional como Juan Pablo Márquez (cadete masculino) y Ñete Bohigas (infantil femenino). "Han trabajado con una gran predisposición, muy atentos a todo los que sucedía, aportando su experiencia en la élite y dándonos seguramente una visión distinta de nuestros problemas y de las cosas que hay que mejorar", indica Madejón. "Tenemos un seguimiento exhaustivo por parte de la Consejería de los Jóvenes y el Deporte en cuanto al apartado de tecnificación y nos dicen que somos la federación que posiblemente mejor la trabajamos", añade.

En todo caso, advierte que el trabajo no se termina con el campeonato. "Tenemos que sacar conclusiones detenidamente, no en caliente. Tenemos programada una reunión con los entrenadores el día 31. Es pronto para hablar del futuro de los chicos o de nombres propios. La actitud ha sido excelente y también la de los padres", concluye el director técnico federativo.