Bebe (Valencia, 1978) es este año la mujer de las dos caras. La de la cantante y la de la intérprete. Su papel en ´La educación de las hadas´ le pone a las puertas de un Goya. Otro vendría si los académicos votan por la canción que ha compuesto para la película de José Luis Cuerda. La pacense mantiene su vinculación del cine pues tiene pendiente el estreno de ´Caótica Ana´, de Julio Medem.

Alberto Amarilla (Cáceres, 1980) es el rostro juvenil de una película que indaga en la juventud y el despertar a la vida. Un Goya para él impulsaría una carrera recorrida en su primer tramo por series televisivas y papeles episódico en ´Mar adentro´ y ´Princesas´, antes de que cayera bajo el amparo de Antonio Banderas. De momento, tiene el premio San Pancracio de Cáceres.

Seis goyas avalan la trayectoria de Reyes Abades (Castilblanco, 1949), al que parece difícil que este año se le escape uno más. Sus tres candidaturas inciden en la importancia del extremeño en el terreno de los efectos especiales.