Dana Reeve, viuda de Christopher Reeve, murió el lunes a los 44 años, víctima de un cáncer de pulmón. Ella reveló su enfermedad en el 2004, un año después de la muerte del intérprete de Superman, a quien atendió durante ocho años y apoyó sin condiciones en la búsqueda de un tratamiento para luchar contra la parálisis. Dana (foto), que no era fumadora, presidía la fundación que lleva el mismo nombre del célebre actor.