El profesor de la Universidad de Boston Christopher Maurer encontró por casualidad en la Biblioteca del Congreso de EEUU, en Washington, el primer borrador, escrito y con correcciones a mano, del poema de Federico García Lorca Oficina y denuncia , incluido en Poeta en Nueva York .

El manuscrito es toda una "rareza", no sólo porque se creía perdido, sino porque contiene las correcciones a lápiz de García Lorca, explicó a Efe el hispanista.

En el borrador se pueden ver versos que no aparecieron en la edición final, publicada en el poemario escrito entre 1929 y 1930 durante la estancia de García Lorca en Nueva York y un posterior viaje a Cuba.

"Y me ofrezco a ser devorado por los campesinos españoles", escribió de su puño y letra García Lorca, en un poema que habla de la arrogancia y soberbia de una ciudad, Nueva York, consumida por sus ansias de poner precio y valor a las cosas.

Finalmente esta afirmación desapareció de la estrofa: "Me ofrezco a ser comido/ por las vacas estrujadas/ cuando sus gritos llenan el valle/ donde el Hudson se emborracha con aceite".

"Me chocó la riqueza de las variantes", explicó el profesor Maurer en una conversación telefónica desde la Universidad de Boston, si bien reconoció que la corrección que había hecho el poeta fue acertada.

El hallazgo de este autógrafo fue totalmente casual, dado que la primera referencia que tuvo del él fue haciendo una búsqueda por internet de material para su próximo libro, que narrará la estancia de Lorca en Nueva York.

En su búsqueda vio que la Biblioteca del Congreso de EEUU aparecía el nombre de García Lorca en un catálogo sobre música. Cuando viajó a la capital estadounidense para examinarlo, descubrió que era uno de los seis poemas autógrafos de Poeta en Nueva York que estaban desaparecidos. Maurer pasó "meses" intentando reconstruir la historia del recorrido del poema, que se suponía había estado en manos de la familia del poeta canario Jose Maria Millres Sall, aunque la hija de éste dijo desconocerlo.

El caso es que el manuscrito fue depositado en la biblioteca por el musicólogo Hans Moldenhauer, que lo compró en una subasta neoyorquina por 230 dólares. La biblioteca del Congreso lo cita por primera vez en un catálogo en 2005.

El viaje que Lorca realizó a Nueva York tuvo una importancia enorme en su trabajo. "Transformó su obra. Antes de llegar a Nueva York no sabía lo que era una multitud urbana, una sociedad con múltiples religiones y razas. Le abrió una nueva visión de la modernidad", explicó.