El grupo granadino de rock Los Planetas fue anoche el gran vencedor de la segunda jornada del festival Primavera Sound al congregar en su escenario principal, Estrella Damm, a una multitud que coreó tanto las nuevas canciones de "La leyenda del espacio" como las piezas más antiguas y conocidas. Lejos de sentirse amilanados por la responsabilidad de ser los cabezas de cartel más claros del programa de ayer, y ante quizás un poco menos de público de las 20.000 personas asistentes el jueves, la banda de Jota y Florent reinó con un montaje escénico espectacular, una iluminación en rojos y azules impactante y unas imágenes, nunca del concierto en directo, tratadas por ordenador.

Eran las 02.05 horas de la noche cuando "Ya no me asomo a la reja" abrió el fuego, y luego el Parc del Fórum ardió durante una hora y media con un buen concierto de los granadinos, que no excelente, aunque en su caso, y por lo inusual de la situación, hay que valorarlo con creces. No contentos con conseguir que la voz de Jota sonara inteligible durante gran parte del concierto, Los Planetas impusieron su estilo, su actitud y sus melodías pop pespunteadas con las guitarras psicodélicas de Florent y la batería de Erik Jiménez, un mazazo rítmico que ayer tocó protegido por un dosel.

Aún faltaban nuevas piezas, que mantienen el nervio flamenco con el noise-rock del grupo, como "Entre las flores del campo", "La verdulera", la denuncia social de "Reunión en la cumbre", "Alegrías del incendio" o "Si estaba loca", que centraron el grueso de la primera parte del repertorio. Para la segunda parte se guardaron un buen puñado de clásicos, canciones generacionales chilladas al viento y la humedad del Mediterráneo e interpretadas por un grupo que sonó compacto y engrasado, como la épica "Corrientes circulares en el tiempo", "Plan de fuga", "David y Claudia", "Un gran día", "Segundo premio", "Santos que yo te pinte", "De viaje", "Brigitte" o una brutal "Pesadilla en el parque de atracciones" en el bis.

Otros platos fuertes

El festival había ofrecido en otros escenarios perlas de buena música, y así el andaluz Sr. Chinarro actuó ante una marea de cabezas, cuajó un más que correcto concierto a partir de su último trabajo, "El mundo según", y sonó apañado excepto cuando su corista insistía en irse de tono. Reinventar el legado de The Jam fue lo que hicieron Maxïmo Park, la enésima sensación musical lanzada desde Gran Bretaña, que, eso sí, sudaron la camiseta con un concierto enérgico, tan convincente como el hardcore de los veteranos Girls Against Boys, que tuvieron menos público que los Modest Mouse de Johnny Marr.

Todas las promesas y grandes esperanzas musicales empequeñecieron luego al sonar los primeros acordes de Low, que empezaron dubitativos, casi probando sonido, y fueron ganando cuajo con una ducha de slowcore melódico y oscuro sobre el festival. Un evento que anuncia que esta noche la actuación de Battles cambia de horario y escenario, pasando a ocupar el hueco dejado por la cancelación de Klaxons, por lo que los autores de "Atlas" estarán en el escenario Rockdelux a las 3.35 horas de la madrugada.