«Mi baile sí que duele pero es un dolor gratificante, y es un dolor que cambia y que puedes transformarlo en arte»

«Esa forma exhaustiva como usted dice de marcar es una forma diferente de sentir el ritmo. Aparte de eso, yo soy un amante de la percusión y del trabajo de los percusionistas cuando son capaces de acompañar el baile y no, con el simple hecho de hacer ruido»

«He aprendido mucho con Molina y Yerbabuena, principalmente, porque son grandes personas, innovadoras y maestras del arte. Ellas han creado estilos diferentes del flamenco y han conseguido que viéramos la danza a un nivel muy superior del que estábamos acostumbrados a ver».