No es suficiente verse entre los Ferrari, mezclado entre los BMW, por delante de los McLaren. Ya no consuela a Fernando Alonso rodar al ritmo de los equipos a los que consideraba rivales por el título, porque en Renault tienen "la certeza" de que el Tribunal de Apelación considerará legales el día 14 los difusores de Brawn, Toyota y Williams, según confiesan en secreto sus ingenieros. Y en Sepang, un circuito donde no cabe esconder nada, un trazado en el que las virtudes y defectos de los coches quedan al aire, Alonso necesitó "una vuelta suicida" para clasificarse en la décima plaza. Eso sí, saldrá noveno por la penalización de Sebastian Vettel. "Estamos por debajo de lo que esperábamos. Nos faltan cinco décimas para estar con los de arriba", se lamenta. Y arriba, en la pole, figura, cómo no, un Brawn, nuevamente el de Jenson Button, el líder del Mundial. Después los Toyota, un Williams, un Red Bull... Solo la lluvia, y se espera tormenta para el Gran Premio (11.00 h, La Sexta) puede variar ese orden impuesto por la diferencia en la interpretación del nuevo reglamento.

MAS PROTESTAS BMW se unió ayer a Renault, Ferrari y Red Bull y reclamó ante los comisarios la ilegalidad de los difusores de Brawn, Toyota y Williams, pero los comisarios volvieron a decidir que eran legales y la escuadra alemana apeló. Solo les queda apurar el espionaje legal. Miran, fotografían y toman notas al pasar frente al box de los Brawn, Toyota y Williams. El suelo del monoplaza es la parte clave, pero también las soluciones de la suspensión trasera. Es poco probable que todos ellos acaben el nuevo diseño del coche para el GP de China, quizá algunos puedan estrenarlo en China y Renault tiene claro que no será antes del GP de España en Montmeló ¿Cuántos puntos sumará para entonces Jenson Button? Irá camino de los 50. El líder demostró ayer el poderío de su coche con la segunda pole consecutiva que arrebató a un especialista en calificaciones, Jarno Trulli, con un gran coche, el Toyota, por menos de una décima.

"En cierto modo, es algo decepcionante haber perdido la pole por solo unas centésimas, pero ahora mismo la F-1 está así", se lamentó el piloto de Toyota. Button calificó con más combustible y solo una carrera loca puede poner en peligro su segunda victoria. El inglés disfruta de una oportunidad con la que ya no contaba, un coche ganador. Y el inglés está aprovechándola. La comparación con su compañero así lo atestigua. Rubens Barrichello no rinde al mismo nivel. Ya calificó por detrás en Australia, donde falló en la salida.

El brasileño fue ayer cuarto, pero el viernes hubo de reemplazar la caja de cambios y saldrá octavo, tras Kimi Raikkonen, y por delante de Alonso, los dos primeros coches de la parrilla equipados con KERS. Dos rectas de casi un kilómetro tampoco han servido para que los Ferrari, Renault o McLaren saquen ventaja del sistema de recuperación de energía. Pero es que si lo quitan, el coche pierde tres décimas, como le pasó a Nick Heidfeld el viernes, cuando rodó con y sin KERS en la primera y segunda manga. El problema de estos coches no es el sistema en sí, sino la cantidad de horas de trabajo de sus ingenieros, el dinero que han restado de la evolución aerodinámica para invertirlo en el KERS.

Y Sepang lo desnudó como nadie justo en el segundo sector, el de más curvas, el de virajes rápidos, donde se "necesita una buena aerodinámica", confirma Alonso. Ahí se hundieron Renault, Ferrari y McLaren. "Hemos obtenido el resultado esperado. Aún no tenemos el ritmo suficiente para entrar en la Q-3", confirmo Lewis Hamilton, el primero de los dos McLaren.