Moral. Esa es la palabra que resume el estado de ánimo de Cáceres y Plasencia, representantes extremeños en la Liga LEB, que mañana disputan fuera de sus canchas los partidos correspondientes a la quinta jornada.

El Cáceres, pendiente de solucionar sus problemas de cobro, viaja a Inca para enfrentarse al equipo balear (21.00 horas). El buen partido y la victoria ante el Tarragona del pasado viernes, la segunda en lo que va de temporada, han insuflado mucha confianza al grupo de Ñete Bohigas, hasta el punto de que ha pasado a un segundo plano el debate sobre el fichaje del extranjero que sustituya temporalmente a Bryan Sallier. Los verdinegros, con el buen estado de forma de Javi Pérez y Higgins, la progresión de Oscar Rodríguez y la versatilidad de Washington para poder jugar dentro, han demostrado que pueden plantar cara a los rivales y así quieren seguir haciéndolo ante el Inca, un equipo asequible, al menos sobre el papel.

Mientras tanto, el Plasencia sigue consolidándose como equipo revelación, liderando la tabla con cuatro triunfos en otros tantos partidos, algo de lo que sólo puede presumir también el gallito Bilbao Basket. Mañana, en la localidad gaditana de Los Barrios, los placentinos aspiran a la quinta.

El equipo extremeño parte esta mañana a tierras gaditanas para velar armas antes de afrontar su nuevo e ilusionante reto: seguir haciendo felices a una ciudad con sus éxitos, sea quien sea el rival. El León lo sabe.