MANCHESTER UNITED 0: Van der Sar, Neville, Ferdinand, Evans, Evra, Nani, Hargreaves (Anderson, m.61), Fletcher, Park (Ronaldo, m.61), Rooney, Tévez (Giggs, m.80).

VILLARREAL 0: Diego Lopez, Angel, Rodriguez, Godin, Capdevila, Cani (Cazorla, m.45), Eguren, Edmilson, Pires (Ibaza, m.67), Fernandez, Franco.

ARBITRO: Wolfgang Stark (GER). Sacó tarjeta amarilla para Guillermo Franco, a Ariel Ibagaza y a López, del Villarreal y a Carlos Tévez, del Manchester United.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la fase de grupos de la Liga de Campeones.

Con una defensa a prueba de balas, aunque pasando serios apuros, el Villarreal de Manuel Pellegrini logró ayer contener a un Manchester United más ofensivo, que contó con el regreso al equipo del portugués Cristiano Ronaldo, casi tres meses después, como suplente, y que se quedó, con un 0-0.

Cristiano Ronaldo reapareció con los diablos rojos en el banquillo de los reservas para deleite de los congregados, recuperado ya de una convalecencia ocasionada por una operación de tobillo.

El Villarreal arrancó el choque en Old Trafford con la cabeza alta y ayer, además, la fortuna se alió con él. La escuadra del chileno Manuel Pellegrini no se dejó amilanar en los primeros compases de su pulso ante el campeón de la Champions, pero fue el once local el que pronto asumió las riendas en el ataque, encadenando ocasiones peligrosas en el área amarilla y poniendo en verdaderos aprietos a los zagueros españoles.

FUERTE RITMO El once inglés no bajó nunca el ritmo. Se propuso poner presión hasta el final al Villarreal y lo consiguió. El plantel español aguantó el tipo en esta mitad, y generó su primer amago a la portería inglesa con un contragolpe del francés Robert Pires.

Los hombres de Pellegrini continuaron inquebrantables en la zaga al arranque del segundo acto y mostraron algo más de ambición tras el descanso.

Seguía siendo el United el equipo que creaba la tensión en el área rival, pero fue el once amarillo el que creó la primera gran ocasión. A los 60 minutos, el Villarreal tuvo una ocasión de oro con un centro de Angel y que remató de espuela Guille Franco, aunque el balón se estrelló en el poste inglés.

Los últimos minutos fueron de agonía para los de Pellegrini. El Manchester apretaba cada vez más aunque no atinaba con el golpe mágico, ni siquiera con Ronaldo en el campo.