Ron Dennis lo ha desmentido, pero la agencia italiana Ansa asegura que el patrón de McLaren y otros miembros de la cúpula directiva de la escudería, han recibido una notificación de un juzgado de Módena, en el mismo circuito de Monza, informándoles de que están siendo investigados por acusaciones de fraude deportivo, violación de secreto industrial y apropiación fraudulenta.

El paddock es un continuo ir y venir de rumores, soplos, desmentidos. En ese contexto se mueve la verdad del caso del espionaje entre Ferrari y McLaren. No hay que olvidar que del fallo deportivo que emita la FIA el próximo jueves, el caso ha llegado a la justicia ordinaria por un doble camino: un tribunal de Londres y otro en Módena.

De lo que sí hay confirmación es que Mike Coughlan, el jefe de diseño de McLaren que recibió del ingeniero de Ferrari Nigel Stepney la información, declaró el pasado día 10 de agosto en la Corte de Londres que tenían conocimiento del dosier secreto de Ferrari, Paddy Lowe (jefe de ingenieros), Martin Whitmarsh (director técnico) y Rob Taylor (diseñador jefe) y responsable directo del nuevo repartidor de frenada de McLaren que ha permitido mejorar el rendimiento de los neumáticos, y según se dice desde Ferrari, es una copia del usado por sus coches.