Dos deportistas extremeños con discapacidad dieron toda una lección de tesón el pasado fin de semana. Uno de ellos, Domingo Carretero, consiguió coronar una de las cimas más altas de España, mientras que el otro, Sergio Asensio, tuvo que abandonar en pleno camino.

Situado en la Sierra de Gredos y enclavado en la provincia de Ávila, el Pico del Moro Almanzor, con sus 2.591 metros, es una de las ascensiones más cotizadas por los alpinistas en la temporada invernal, ya que cualquiera de sus caras presenta una dificultad reseñable y más o menos complejas según el itinerario.

Según recoge en su web la Federación Extremeña de Montañismo, el sábado su Grupo de Alpinismo Adaptado se disponía a llevar a cabo el ascenso de esta montaña por su vía más emblemática y codiciada, la denominada ‘Norte Clásica’, que con 200 metros de ascenso y resaltes de trecer grado en hielo se convierten en una estética y alpina escalada a la cumbre más alta del Sistema Central.

Domingo Carretero y Sergio Asensio fueron los auténticos protagonistas. Acompañados por el responsable del grupo, Alberto García, partían del refugio Laguna Grande un poco antes de las 9.00 horas dirección al Almanzor ataviados de su equipo para acometer el reto.

Unos problemas físicos impedían a Asensio continuar cuando ya se enfilaban las últimas palas antes de la base de la vía, por lo que tomaba la decisión de volver al ser el último punto en el que podía realizar la retirada con seguridad. Es fácil imaginar que la decisión le costó mucho, pero había que priorizar que no hubiese dificultades añadidas.

ÉXITO CONSEGUIDO / Por su parte, Carretero, que sufre un problema de visión --es miembro de la ONCE e integrante del equipo de carreras por montaña de la federación--, junto con Alberto García, seguía hacia adelante. Su objetivo era primero plantarse en la base de la vía y luego acometer la escalada, que presentaba buenas condiciones, aunque no las mejores tras las últimas nevadas caídas en la sierra.

Al llegar a la cima una rápida foto y para abajo a toda prisa, ya que se aproximaba una fuerte nevada por el oeste. Las previsiones eran que nevaba por la tarde, pero se adelantó. «Nos hubiese gustado disfrutar más el momento, ya que la satisfacción tras alcanzar la cima era muy grande, pero por seguridad tocaba bajar y rápido», cuenta, con evidente satisfacción.

MÁS PROYECTOS / «Es impresionante ver como las personas con otro tipo de capacidades se anteponen a los problemas día a día y son tenaces y constantes como ellos solos», destaca la Federación Extremeña. Por parte de los técnicos, «la satisfacción y la alegría de Domingo tras completar un reto como este que teníamos en mente hacia tiempo es impresionante y difícil de describir».

Ya anteriormente se han completado varios retos, pero estos deportistas siempre quieren más, comenta Alberto García. « Para el 2018 estamos empezando a planificar una expedición a algún sistema montañoso importante con el grupo», añade.

Para rematar el fin de semana porque la montaña les apasiona, se ascendió el domingo a la cima del Morezón, de 2.389 metros, desde la Laguna Grande, que no es una de las vías de ascenso más habituales.