Fernando Torres, delantero del Atlético de Madrid, encara relanzado con su mejor versión del curso y reafirmado con dos goles el partido de vuelta de las semifinales de Copa del Rey ante el Barcelona en el Camp Nou, donde ha marcado seis tantos y ha protagonizado los dos últimos triunfos rojiblancos.

No es un estadio más. Allí, donde mañana competirá con el Barça y una desventaja de 1-2, ha vencido de rojiblanco, ha dominado partidos, ha alcanzado una final de la Liga de Campeones, ha logrado goles ganadores y ha debutado en Primera División, pero también ha vivido uno de los peores momentos de su carrera, la expulsión de la pasada campaña en cuartos del máximo torneo europeo.

Lo último lo sufrió en su visita más reciente, a la media hora, cuando una entrada sobre Sergio Busquets supuso la segunda tarjeta amarilla y su expulsión. Antes, había dado ventaja a su equipo con el 0-1, uno de los ejemplos goleadores, hasta seis, que hacen del Camp Nou un escenario inigualable para el ariete como visitante.

Sus otros cuatro tantos de rojiblanco en ese campo fueron sinónimo de victoria, las dos últimas de su equipo a domicilio frente al Barcelona, hace ya una década, con sendos ‘dobletes’ del atacante, muy por debajo en los pronósticos, pero ganador desde sus acciones y desde sus goles. Las dos en el mes de febrero, el mismo periodo donde se ubica el partido de mañana, este día 7. Una fue el 6 de febrero de 2005 por 0-2, con dos dianas suyas; otra el 5 de febrero de 2006, la última vez que venció allí el Atlético. Él hizo dos de los tres tantos; el otro fue obra del argentino Maxi Rodríguez. Venció 1-3. Su otro gol en ese estadio fue el 24 de abril de 2012 con el Chelsea frente al Barça, en semifinales de Liga de Campeones, competición de la que el conjunto londinense y Torres después fueron campeones por penaltis en la final frente al Bayern.