A principios de la semana únicamente se habían vendido unas 50 entradas, un dato que podía desilusionar al más optimista. Pero la confirmación de que habrá partido ha disparado la demanda en los últimos días y lo que podía haberse temido en algún momento, unas gradas desiertas, no se producirá en principio. Y es que, según datos de la propia Federación Extremeña, ya se han vendido 1.300 entradas, y se han repartido muchas más a escolares de toda la región. Además, se espera que el último ´empujón´ se dé hoy mismo en las horas previas al encuentro en las taquillas del propio estadio. Los precios son sumamente asequibles: 5 euros para la tribuna y 3 para preferencia.

El amistoso ha levantado también mucho interés en el colectivo suramericano de Extremadura y, como es lógico, en concreto entre los peruanos que trabajan en las dos provincias. Según el Instituto Nacional de Estadística, en la actualidad hay 462 censados en la comunidad, la mayoría dedicados a la construcción y a labores agrícolas. Muchos de ellos ya han adquirido su localidad y, como ha sucedido cada vez que la selección española ha jugado en casa contra una selección del Nuevo Continente, es de esperar que las dos hinchadas ´confraternicen´ y al mismo tiempo ´rivalicen´ en la grada en apoyo de sus equipos.