Nada cambia en el Extremadura, aunque la rumorología de las últimas horas hiciera encender las alarmas. El presidente del club, Manuel Franganillo, se reunió anoche con aficionados y peñistas en Destilerías Espronceda para explicar en qué punto se encuentra en club y para pedirles el máximo apoyo posible para la recta final del campeonato «porque nos estamos jugando algo muy bonito».

El presidente azulgrana ha recalcado en varias ocasiones que la viabilidad del proyecto está garantizada, aunque es evidente que las personas del grupo inversor que llegaron en enero del pasado año han decidido dar un paso a otro proyecto deportivo, en este caso el Córdoba. Franganillo ha explicado a la afición que la estabilidad económica e institucional del club no peligra y que el objetivo sigue siendo estar entre los cuatro primeros clasificados a final de temporada.

El club ha querido remover los sentimientos de la afición en un momento de bajón por los últimos resultados. Manu García, portero azulgrana, ha comentado que «es momento de que todos nos dejemos de tonterías y vayamos a una. Nosotros a jugar, el club a trabajar y la afición a animar. Ese es el camino».

El Extremadura tiene un partido vital ante el Melilla este domingo. En los visitantes no estará un ex azulgrana, Boateng, lesionado esta semana.