Coincidencia generalizada, con el lamento siempre por delante: el Cáceres no debe desaparecer. Todos aquellos que, como jugadores, técnicos e incluso aficionados han sido alguien en el club han señalado, cuestionados por este diario, que el baloncesto debe continuar siendo algo importante en la vida de la ciudad, pese al descenso.

La autocrítica es una de las claves, en cualquier caso. Toni Pedrera, emblemático exjugador verdinegro, apunta: "A mí me parece que es lo que nos merecemos. Estoy con Manolo Flores: entre todas la mataron y ella sola se murió. No ha respondido ni el público, ni las instituciones ni nadie... y ahora todos a llorar y rasgarnos las vestiduras, y yo mismo me incluyo, ya que hemos fallado todos". Pero extrae la lectura positiva: "Lo mismo esto nos viene bien".

El excapitán Enrique Fernández declaró ayer, desde Lleida, donde trabaja, que "es una pena que un histórico que creíamos que estaba afianzado en la ACB haya descendido". Como Pedrera, cree que "no hay un culpable único" de la situación y que "he sufrido mucho" este año, sobre todo teniendo en cuenta que él mismo presenció la victoria verdinegra ante el Caprabo. "Yo vi entonces a un equipo muy serio, me encantó y creí que se arreglaría todo".

Fernández opina que durante todos estos años "ha faltado un profesional" que maneje la política deportiva del club y que en esta temporada los problemas de todo tipo "han minado la plantilla".

SIN DRAMA

Jesús Luis Blanco, exsecretario técnico del club en el año del ascenso a la ACB y actual presidente de la federación extremeña, argumenta: "Ha sido un paso atrás, pero no dramático. Otros equipos han subido tras bajar y hay que reconocer que ha sido un palo, pero al mismo tiempo un paréntesis. Es hora de reflexionar".

Miguel Angel Reyes, exjugador verdinegro durante varias temporadas, opina: "No se puede jugar una liga sin americanos, con tantos problemas, ya que en la ACB se paga todo muy caro", dijo, al tiempo que se mostró pesimista sobre el futuro inmediato: "Es complicado resurgir".

Carlos Sánchez Polo, alcalde de Cáceres el año del ascenso y actual vicepresidente de la Junta, prefiere hablar como aficionado. "Es lamentable para el baloncesto de Cáceres y ya se veía venir; hubiera sido milagroso salvarse. El club no debería morir", afirma Sánchez Polo.

Lázaro García, concejal de Deportes y preparador físico, valora: "Estoy bastante triste, tanto como concejal como por empleado del Cáceres. Pero yo quiero tranquilizar a la gente porque garantizo que el alcalde no dejará tirado al club. Hay que jugar en la LEB e intentar volver".