La colocadora brasileña del Extremadura Arroyo Kamila Augusto afirmó ayer, en relación a la victoria obtenida el sábado ante el Aguere, y al hecho de que se haya certificado con anterioridad el descenso de categoría que, «Arroyo, por ilusión, condiciones, seriedad y trabajo no parece un equipo descendido. No sé cómo explicarlo, pero cuando lo ves trabajar a diario es muy duro entender que el año que viene no estará en Superliga».

Augusto, que llegó a la disciplina del club extremeño junto a su compatriota Gabi Silva en el mes de noviembre, asegura que no estar la próxima campaña en la élite del voleibol femenino español «será duro, pero con la ilusión de las jugadoras, del cuerpo técnico y de todo el pueblo, con el tiempo se verá como un pequeño paso atrás previo a volver con los más grandes con más fuerza y confianza».

En cuanto al partido del pasado sábado, reconoce que dos horas antes del inicio, «ya en el vestuario, se notaba algo en el ambiente algo diferente, pero era difícil de prever qué era, cuando en los 20 partidos anteriores solo habíamos sumado un triunfo».

«Estábamos todas las compañeras emocionadas por jugar el último partido de la campaña en nuestra cancha, y aunque no decíamos nada, todo parecía indicar que el final de la jornada podría ser diferente, y la verdad es que desde el primer momento, ese cambio se pudo constatar en la cancha», añade.

Kamila Augusto saltó a la pista en el segundo set, en lugar de su compañera Beatrix Meléndez-Pál, «y pude comprobar que los balones recepcionados por Bea Gómez y Celia Bédmar me venían en muy buenas condiciones, que la coordinación con las dos centrales era la idónea, y que esa conexión con las rematadoras de ala también era especial».

La colocadora asume con serenidad que no habrá nada en juego en el último encuentro de la temporada que disputarán el próximo sábado en la cancha del líder, el Naturhouse Ciudad de Logroño, «como tampoco lo había el sábado pasado, pero queremos seguir demostrando que somos un equipo de raza, y antes de volver a mi Brasil querido, me encantaría poder concretar otro gran partido, porque el equipo se lo merece».