Andras Kavas llegó, durmió, se sometió a pruebas y entrenó. Las primeras horas del ala-pívot esloveno a prueba en el Cáceres Patrimonio fueron especialmente intensas, pero cargadas de mensajes positivos de cara a la confirmación de su fichaje y su previsible debut el próximo domingo ante el líder, Oviedo (12.00 horas, Multiusos).

«Estoy muy agradecido por la oportunidad que me brinda el Cáceres para dar el primero de los, espero, muchos años como profesional», dijo a modo de declaración de intenciones a primera hora de la tarde, aún sin conocer si podrá ser jugador del equipo, circunstancia que se decidirá entre hoy y mañana.

Antes, el jugador, de 25 años y con muy buenas condiciones, según los informes que se manejan en una trayectoria que apuntaba alto pero que se ha visto truncada por las lesiones, había visitado el Hospital Quirón Salud, proveedor médico del club. El club apuntó en su web que «las primeras sensaciones son positivas y durante mañana (por hoy) y el miércoles se completará el reconocimiento con más pruebas».

ENTRENAMIENTO / Kavas conoció a alguno de sus nuevos compañeros de equipo en el Multiusos. El cuerpo técnico que dirige Ñete Bohigas planteó un entreno específico con la participación de Carlos Toledo, JC Fuller, Mantas Riauka y el canterano Miguel Ángel Rueda, «para que el alapívot esloveno le vaya cogiendo el aire a su nuevo destino», informó la entidad verdinegra en su nota oficial.

«Vengo a dar el máximo y creo que puedo ayudar al equipo», dijo un Kavas que ya conoce lo que Bohigas espera de él de cara al futuro, según explicó. «Puedo aportar versatilidad en las dos posiciones interiores», dijo también el baloncestista.

Falto de ritmo de competición, como es lógico después de tanto tiempo sin partidos oficiales, Kavas lleva unos meses entrenando con un equipo de su ciudad natal y, según comentó, «me esforzaré a tope para ponerme al nivel de mis nuevos compañeros lo antes posible». Ayer se le vio con buenos movimientos y fundamentos, aunque su nivel físico no es el mejor, pero se espera que pronto pueda tenerlo.

Por su parte, Ñete Bohigas no duda ni un ápice de que el jugador puede ayudar mucho al equipo verdinegro ni tampoco de su calidad porque «es un jugador que siempre ha sumado cuando ha jugado con regularidad», comentó antes de iniciar el entrenamiento, a la vez que espera de él que «entre rápidamente en la dinámica del grupo en una liga tan exigente táctica y fisícamente como es la LEB Oro».

Kavas estaba en la agenda del Cáceres desde hace ya tiempo. Como también de la selección absoluta de Eslovenia, pero no ha llegado a debutar debido a sus problemas físicos.

Los halagos hacia su juego y talento se han sucedido incluso en publicaciones especializadas como Zona de Basquet. En una selección realizada en este medio entre los que apunta como diez mejores seniors de la NCAA nortemericana, se asegura: «estamos hablando de un proyecto muy interesante de jugador, probablemente el que más de esta lista. Con su altura y condiciones, dominaba en la NCAA II, todo ello unido a su buena muñeca que le permite abrirse en los bloqueos de continuación anotando con comodidad desde media distancia o el triple».

También abunda en sus condiciones como jugador de valía: «por dentro sabe aprovechar su cuerpo (tampoco existen muchos rivales de su tamaño en la categoría) y sus brazos largos para postear y anotar», se explica, para apuntar como otra cualidad «valiosa en un hombre alto su capacidad de pasar». En defensa, se asegura, «ocupa bien el espacio y es móvil, aunque tal vez le falte algo de agresividad, y aportar más intimidación. Si su rodilla va bien, tiene hueco asegurado en el profesionalismo».

NOTABLES NÚMEROS / Sus números, en efecto, no son los de un jugador de carencias, sino más bien justamente lo contrario: en ocho partidos en la liga de desarrollo estadounidense, Kavas firmó en Harding casi 21 puntos, 6.6 rebotes y 1.6 asistencias por encuentro antes de lesionarse.

Por su parte, se espera que para el domingo, además de Andraz Kavas, pueda estar disponible finalmente el base José Antonio Marco, que ni siquiera pudo viajar a Lugo para jugar ante el Breogán por un esguince de tobillo. Las sensaciones positivas del encuentro ante los gallegos contrastan con este problema surgido durante la semana pasada en el equipo de Ñete Bohigas.