«El partido ha estado marcado por dos golazos. A partir del 0-2 tuvimos 10 o 15 minutos aceptables y luego fue un querer y no poder. Nos enfrentamos a un equipo muy sólido en el que tuvimos nuestras opciones pero estuvimos poco acertados, como siempre. Además, concedimos demasiado atrás y pese a que son dos golazos, hay que cortarlas de raíz y se pueden evitar». Así de claro se mostraba el entrenador del Badajoz, Juan Marrero, tras la derrota de su equipo.

A su juicio, su equipo lo intentó «pero no pudo ser dándolo todo. Cuando salimos al descanso para meter una marcha más, llegó el golazo de Boateng desde 45 metros. Tuvimos bastantes errores que hay que corregir. Es verdad que en la primera parte tuvimos más situaciones que ellos, pero falta el toque de calidad que da el primer gol de ellos, por ejemplo. Nosotros generamos bastantes situaciones, como córners y faltas, pero se nos niega el gol y hay que insistir. Estoy seguro de que llegará el acierto». Marrero añade que «nos falta fluidez y acierto final para meter oxígeno al equipo para que los esfuerzos sean más intensos». Del hecho de llevar cinco partidos sin ganar, considera que «no puede aparecer la ansiedad porque hay que tener fuerza mental y el fútbol es el deporte del lunes y al siguiente partido. No puede aparecer el miedo a perder o bajar los brazos. No va a suceder y el equipo es fuerte mentalmente».