Las mejoras aerodinámicas en las que Renault ha estado trabajando parece que empiezan a dar sus frutos, y Fernando Alonso pudo comprobarlo ayer en el Circuito de Cataluña, donde rodó en 1:20.283, a 667 milésimas del Ferrari de Massa y a 164 del McLaren de Lewis Hamilton.

El bicampeón mundial por fin pudo probar en el trazado barcelonés la famosa aleta de tiburón --más pronunciada incluso que la que llevan los Red Bull--, que va montada encima del motor y que sobresale por encima del alerón trasero. A juzgar por los tiempos que hizo, el ingenio que también ha copiado Toro Rosso, parece que da resultados.

El español estaba ansioso por comprobar qué es lo que había cambiado --supuestamente a mejor-- en el chasis de su Renault, y fue el que más vueltas dio al circuito (119). A pesar de tener una avería a primera hora de la tarde, el asturiano rodó en el mismo segundo que el Ferrari de Massa (1:20.283) el Red Bull de Coulthard (1:20.392) y el McLaren de Hamilton (1:20.452), los tres pilotos más rápidos que no montaron neumáticos lisos.

Por los tiempos que se vieron, parece que la aleta de tiburón hace sensiblemente más competitivo al R28, máxime cuando todos los equipos han viajado a Barcelona con mejoras aerodinámicas que probar esta semana.