No ha gustado a muchos que una prueba del World Pádel Tour vaya a disputarse en el Anfiteatro Romano de Mérida. Varios partidos políticos han expresado públicamente su repulsa, alegando que el patrimonio histórico se ve amenazado por el montaje que conllevará el evento. Mientras, el Gobierno de Extremadura respondió ayer que no cambiará sus planes y que el torneo mantendrá la ubicación escogida en principio.

El candidato del PSOE a la alcaldía de Mérida, Antonio R. Osuna, manifestó que tiene la sensación de que "los emeritenses creen que el Consorcio de la Ciudad Monumental es muy exigente siempre que se trata de realizar obras domésticas en el centro de la ciudad pero que, cuando los actos son organizados o los realiza el PP, siempre tienen barra libre ".

Osuna entiende que en anfiteatro "no es el más idóneo para este tipo de eventos" y considera, además, que "la autorización no cumple con las normas reguladoras de la utilización de espacios monumentales del conjunto arqueológico de Mérida".

Para Alvaro Vázquez, portavoz de IU-Mérida, la organización del World Pádel Tour "es del todo contraria a derecho, ya que no dispone de un contenido cultural, impide el acceso a los visitantes en el recinto, y además incumple los criterios mínimos que se deben contemplar para su utilización como la previsiones de afluencia de público o la complejidad de las infraestructuras que se van a emplear, o por el movimiento de público que suponen".

UPyD Mérida está en la misma línea. Su líder, Francisco Medina, lamenta la "total falta de visión política y de proyecto de ciudad que una vez más demuestra el equipo de gobierno del señor Pedro Acedo el alcalde en la gestión de un evento que debería suponer un acontecimiento positivo para Mérida y que, sin embargo, una vez más encuentra un amplio rechazo social por la forma de ejecutarlo. Es más que evidente que la ubicación no es, ni mucho menos, la más adecuada. Mérida dispone de otras infraestructuras que pueden perfectamente albergarlo", argumentó.

RESPUESTA DE TENIENTE Sin embargo, el Gobierno de Extremadura no su idea sobre la prueba, prevista para mayo. Así lo aseguró ayer la vicepresidente regional, Cristina Teniente, a pregunta de los periodistas.

A su juicio, un acontecimiento deportivo de estas características es una promoción "universal para ese espacio, para Mérida y para Extremadura", según recoge Efe. "Respetando todas las opiniones", dijo Teniente, su gobierno cree que es una acción "estratégica" para la difusión del deporte, la cultura y el turismo, que "va creciendo en la región por acciones controvertidas como éstas".

En este sentido, citó la polémica por los Premios Ceres, pero que han logrado que el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida tenga "una proyección internacional y de calidad".