Pocas cosas debe haber más satisfactorias en la vida que sentirte arropado por tus compañeros de profesión cuando vives un momento importante. Y más todavía en un oficio tan individualista como el de entrenador, en este caso de baloncesto. Mario Madejón, director técnico de la Federación Extremeña, presentó ayer en Cáceres su libro, Segundo Nivel ENE FEB , enfocado a quienes quieren sacarse el título. Y lo hizo rodeado de personajes de los banquillos tan significados como Porfirio Fisac (Valladolid), Juan Pablo Márquez (Tarragona 2017), Gustavo Aranzana y su antecesor en el Cáceres 2016, Manuel Piti Hurtado. También acudieron el consejero de los Jóvenes y el Deporte, Carlos Javier Rodríguez; el presidente de la federación autonómica, Jesús Luis Blanco, y el exjugador José María Panadero.

Pese a todos los nombres, Madejón fue el emocionado protagonista de una tarde en la que se filosofó mucho sobre baloncesto y sobre lo que significa ser entrenador, "algo en lo que no puedes dejar de formarte hasta que te den la oportunidad, sin perder la ilusión ni un día". "No sé qué tiene, pero pocos entrenadores que conozco lo han dejado. Yo empecé con 17. Con 24 dirigí un partido del Cáceres CB en la Copa Korac. Podía parecer un sueño, pero fue casi dramático, me llegó demasiado pronto", recordó, en referencia a cuando en el 2001 sustituyó a Manolo Flores interinamente.

El libro, que puede adquirirse en la web de la Federación Española (www.feb.es ) viene acompañado de un DVD explicativo y se va a traducir al inglés y al francés para poder ser distribuido en otros países. "He querido hacer algo didáctico", apuntó Madejón, que contó cómo ha empleado en ello dos años y medio de su vida ("le he echado muchas horas de madrugada"). Para el resultado final partió de mil folios de anotaciones sobre los que fue seleccionando.

Con cariño

Especialmente cercano a él estuvo Fisac, uno de los entrenadores más destacados en la ACB esta campaña y que suele definirse a sí mismo como "extremeño" en el sentido deportivo, porque sus primeras oportunidades las tuvo con el Doncel. Ambos coincidieron en Algeciras. "El baloncesto es más que cinco contra cinco. Es amistad y trabajo. Lo que más orgullo me da es decir que este libro lo ha escrito un amigo mío", dijo, llegado expresamente desde Valladolid.

También Carlos Javier Rodríguez fue su superior durante una época, cuando trabajó para la consejería deportiva de la Junta. "A Mario le conozco desde 1994 --reconoció--, cuando empezamos a estudiar Magisterio. Aunque pueda parecer muy técnico, el libro ha sido capaz de condensar procesos aplicables a otros deportes y a la vida en general".

Acabó la presentación y los micros se apagaron, pero la charla sobre el baloncesto continuó. Nada raro entre gente que lo tiene tan dentro.