El Real Madrid continúa su progresión después de unos inicios de competición titubeantes, y ayer derrotó al domicilio a un correoso CAI Zaragoza (79-90) que nunca se entregó pero que no pudo con la mayor calidad y profundidad del banquillo foráneo. El conjunto entrenado por Joan Plaza supo mantener el tipo en el segundo tiempo cuando el equipo aragonés se acercaba dando muestras de poder remontar, pero se vio frustrado en todos sus intentos por el acierto madridista, especialmente en los lanzamientos triples.

Por su parte, el Fuenlabrada certificó en su feudo ante el Bruesa (108-75) que, junto al Ricoh Manresa, es firme candidato al título honorífico de equipo revelación de la Liga, aparte de demostrar, una vez más, que por nivel de juego está por encima de los conjuntos que quieren evitar el descenso.