El Sevilla cumplió con el sacrificado trámite de la vuelta de cuartos de final de la Copa de la UEFA e hizo valer con el empate a un tanto en el frío y nevado San Petersburgo el 4-1 cosechado en la ida ante el Zenit ruso, lo que significa plantarse por primera vez en su centenaria historia en unas semifinales de una competición continental. Los sevillistas, que no cesaron de repetir desde el resultado del Sánchez Pizjuán que aún había una vuelta, salieron perfectamente aleccionados y, sin un minuto para ofrecérselo a la galería, se aseguraron disputar la semifinal ante el Schalke 04, con un primer partido en Alemania y el segundo en la capital andaluza.

El tanto del coreano Hyun Young Min, a los cinco minutos de la reanudación, redobló los esfuerzos de los rusos, apoyados por una hinchada que no paró de animar pese al frío, pero el Sevilla no varió en nada, e incluso se permitió el lujo de empatar poco después en la primera contra clara. Kepa marcó en el 62 y fue expulsado en la celebración.