Justo un año y dos meses después de la decepcionante derrota de Madrid como candidata a organizar los Juegos Olímpicos del 2016, con Mérida como subsede olímpica, llega un nuevo sinsabor con la derrota de la candidatura ibérica como organizadora del Mundial de Fútbol del 2018, en el que Badajoz tenía opciones de ser una de las posibles sedes.

Verdugos, de Río de Janeiro a Rusia. Frustración, desde Madrid al resto de España, pasando por Portugal. Decepción, de Mérida a Badajoz. Malas noticias, de Copenague a Zurich.

El sueño se evaporó tras un año y medio de vida. En junio del 2009 la Real Federación Española de Fútbol aceptó a Badajoz como sede integrante del equipo de España y Portugal. Tras esta votación, quedaba la última, pero ya no hará falta.

Difícil de creer

Y sorpresa en la capital pacense. Numerosos aficionados al fútbol estaban convencidos de la victoria de la candidatura ibérica para organizar el mundial, aunque no tanto del proceso de selección posterior con otras sedes españolas.

Hace una semana, en Fehispor, en Badajoz, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Angel María Villar, no quiso soltar prenda. No dijo ni nada bueno ni nada malo de la opción de Badajoz. Para algunos, pudo ser un mensaje de que habría que ver los toros desde la barrera, aunque para otros, una posición coherente no decantarse por ninguna sede a priori. Además, ya en el mes de febrero en una comparecencia en Mérida con el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, Villar había manifestado que Badajoz tenía muy buenas posibilidades. Siempre nos quedará esa duda porque el partido se ha perdido y ya no hay vuelta atrás.

En el Ayuntamiento de Badajoz también ha resultado sorprendente y decepcionante la derrota hispano-lusa. De hecho, alcalde y concejales apostaban por un triunfo de la candidatura ibérica, con la esperanza posterior de superar el corte nacional, por el as en la manga de Badajoz como ciudad fronteriza. Se llevaron una sorpresa cuando vieron el sobre de Joseph Blatter con el nombre de Rusia escrito.

En la calle, más decepción aunque la derrota ibérica no era el único tema de conversación en los mentideros deportivos con variedad de temas para hablar, desde la situación del Badajoz pasando por el cambio de dirigentes en el Cerro. Después estaba el debate de ampliar el estadio Nuevo Vivero a 45.000 espectadores, con todo lo que ello conllevaba. Unos lo veían viable, otros no tanto...

Los baños de multitudes en las fuentes regionales un 11 de julio del 2010, con el campeonato mundial de la selección española, las miles y miles de fotografías inmortalizando un segundo de los extremeños con la réplica de la copa del mundo, en la última semana de un frío y lluvioso noviembre, no tendrán continuidad con una sede mundialista.

Los extremeños tendrán que conformarse con el premio de algún partido más de clasificación de la selección española, llenar los estadios, ser talismán del combinado y disfrutar durante 48 horas de los mejores jugadores del mundo. O quién sabe si esta derrota en las urnas tiene continuidad y se vuelve a hablar con el paso de los años de Badajoz 2026 o sucesivos. Habrá que esperar.