El Villanovense juega hoy en tierras manchegas algo más que un partido ante la Balompédica Conquense (17.00 horas). Los tres puntos en juego pueden significar para los extremeños el seguir con vida en el campeonato liguero, o que por el contrario ver como empiezan esfumarse las opciones de mantener la categoría. Los verdiblancos ocupan la penúltima posición de la tabla clasificatoria con 22 puntos, exactamente 3 menos que el Tenerife B (en puestos de promoción para la permanencia) y el Real Sporting B puesto que ambos están empatados a puntos. Por el contrario, su rival de hoy es séptimo con 33 puntos; ha perdido tan sólo 5 partidos, ha cosechado 8 victorias y 9 empates y tiene a su favor un total de 28 goles, frente a los 21 que ha marcado el Villanovense. La diferencia entre ambos equipos es aún mayor si nos atenemos a los goles en contra; en este caso el Conquense tiene 20 mientras que los verdiblancos han encajado 34.

El técnico Domingo Suero suma hasta tres bajas; las dos primeras son las del capitán Edu Jurado y el lateral izquierdo Manu Cabezas. Ambos deberán cumplir partido de sanción por acumulación de tarjetas. La tercera es la de otro lateral izquierdo, Víctor Marcos, lesionado. El equipo villanovense no solo está necesitado de la victoria por la imperiosa necesidad de sumar puntos, sino por el propio estado de ánimo de los jugadores que no están viendo premiado su esfuerzo en el terreno de juego. Un buen trabajo que sí está sabiendo premiar su afición que despidió al equipo tras el partido de la pasada jornada en casa ante el Racing B de pie y con una gran ovación.

La expedición villanovense partió ayer por la tarde para hacer noche en tierras conquenses; para esta mañana tienen previsto realizar un suave paseo por la ciudad antes de prepararse para el encuentro.