La optimización de procesos también conlleva mejoras medioambientales. Con la venta de fruta a granel, junto a la reducción del grosor de los envases y la eliminación de las bolsas de plástico en el té, se ahorran más de 2.000 toneladas de plástico. Además, quitando los prospectos en artículos de cosmética y reduciendo el cartón se han ahorrado 500 toneladas de papel y cartón.