BUENOS AIRES. Edesur, la empresa eléctrica argentina controlada por la española Endesa, informó ayer de que el robo de piezas de la estructura de sus torres de distribución de energía fue el motivo del gran apagón que afectó a Buenos Aires el miércoles pasado. El corte de energía, que afectó a 390.000 clientes, lo causó la caída de tres torres de distribución, de las que habían robado las piezas de hierro que sostienen su estructura. El apagón duró 40 minutos e inutilizó tres líneas de metro y 600 semáforos. AGENCIAS