COPENHAGUE. El jefe del Gobierno italiano acusó a los trabajadores de "provocar daños a los contribuyentes" con sus acciones y la ocupación de autopistas, puertos y vías de tren. Tras el anuncio de despidos en la compañía automovilística, el lunes comenzó el paro forzado de 5.600 trabajadores, a los que se añadirán otros 2.500.