Basta que el presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed), Ben Bernanke, diga que va a centrar su mirada en la banca para que bajen las cotizaciones de las entidades financieras en todos los parquets del mundo. España no iba a ser una excepción. Santander, BBVA, Popular y Sabadell se dejaron ayer en la bolsa más del 3%. Banesto y Bankinter rozaron las mismas pérdidas.